Olvida los errores del pasado.
Evita concentrarte en todas las cosas indebidas que has hecho (o que te han hecho), pues no te pertenecen ahora. Olvídalas. Es la atención la que crea el hábito y la memoria.
¿Por qué seguir sufriendo por las acciones imprudentes del pasado? Borra ese recuerdo de tu mente y toma la precaución de no repetir aquellas acciones de nuevo.
La memoria humana es un don divino, su propósito no es reflexionar sobre las cosas negativas. Al fomentar la aparición de recuerdos desagradables, sólo conseguirás llevarlos contigo al futuro, lo cual no es provechoso para ti.
A cada ser humano le corresponde la decisión final de cortar las cuerdas de su esclavitud con la espada de la sabiduría o de permanecer cautivo.
Evita concentrarte en todas las cosas indebidas que has hecho (o que te han hecho), pues no te pertenecen ahora. Olvídalas. Es la atención la que crea el hábito y la memoria.
¿Por qué seguir sufriendo por las acciones imprudentes del pasado? Borra ese recuerdo de tu mente y toma la precaución de no repetir aquellas acciones de nuevo.
La memoria humana es un don divino, su propósito no es reflexionar sobre las cosas negativas. Al fomentar la aparición de recuerdos desagradables, sólo conseguirás llevarlos contigo al futuro, lo cual no es provechoso para ti.
A cada ser humano le corresponde la decisión final de cortar las cuerdas de su esclavitud con la espada de la sabiduría o de permanecer cautivo.
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